23/4/22 Nota: Diario Perfil

Los precios de los alimentos y bebidas subirían al menos un 6% en abril

Mientras que el Gobierno apuesta a una desaceleración para este mes, las consultoras prevén lo contrario. Pizzas, facturas, pan y fideos, con las mayores subas a causa del trigo.

Esta semana el Indec dio a conocer el costo de la canasta básica de marzo que se disparó un 7%, por encima de los 6,7 puntos porcentuales del IPC general. El alerta en el Gobierno no afloja y si bien se espera que la inflación se desacelere en abril, el caso de alimentos y bebidas no acompañaría ese ritmo porque tendría un piso del 6%.  

En el tercer mes del año una familia tipo, dos adultos y dos menores en edad escolar, necesitó casi $ 90 mil para no caer en la línea de la pobreza y casi $ 40 mil para no ser considerada indigente, sin tener en cuenta el alquiler. Con estos números, la canasta básica total (CBT) avanzó por encima de la inflación, y la canasta básica alimentaria (CBA) estuvo apenas por debajo.

Interanualmente el índice de precios al consumidor creció 55,1%, casi similar al CBA que subió 55,2 y por encima del CBT que fue del 47,3%.

En los primeros quince días los comestibles aumentaron 3% en CABA

En cuanto a los precios de alimentos y bebidas, el rubro de mayor incidencia dentro del IPC, fue de 7,2 puntos y en febrero 7,5%, con un total para los tres primeros meses del año del 21%. En marzo, la categoría panes y cereales tuvo un alza de más del 12%, que reflejó la repercusión del contexto internacional que tuvo la escalada en el precio de las commodities debido al conflicto bélico entre Rusia y Ucrania.

Un relevamiento realizado por el equipo económico del partido “Integrar”, que lidera el ex legislador Daniel Amoroso, mostró un dato alarmante para los amantes de las pizzerías porteñas, el precio promedio de la pi-zza grande de mozzarella de ocho porciones cuesta $ 1.085, un 143% más del valor obtenido en la última muestra realizada en el mes de junio del 2020, que costaba $ 445. El informe también muestra la “brecha pizzera” que en el caso del barrio de Saavedra donde se encuentra la pizza más cara, con un valor de $ 1.660, una diferencia de más del 200% con la más barata en el mismo barrio que sale $ 490.

Por otro lado, en el caso de facturas el precio promedio es de $ 726,28, que en algunos barrios hay una diferencia de hasta el 80% entre las facturas más caras y las más baratas. También, el informe mostró que el precio del kilo de pan promedio fue de $ 352,44. La muestra se realizó en más de ochenta comercios y los barrios incluidos fueron: Boedo, Caballito, Devoto, Recoleta, San Nicolás, Palermo, Coghlan, Belgrano, Saavedra, Villa Urquiza y Núñez.

Por su parte, Consumidores Libres, que preside Héctor Polino, dio a conocer el costo de la canasta de alimentos de la primera quincena de abril, que aumentó un 2,87% y desde enero acumula 18,54%.

El relevamiento marcó que la zanahoria, la acelga y los huevos fueron los productos que más aumentaron en la primera mitad del mes, con una suba del 113, 61 y 51% por respectivamente.  

En cuanto al trigo y sus derivados, el kilo de la harina de trigo aumentó un 37%, el kilo de pan 37,5% y los 500 gramos de fideo un 13%. El contexto internacional de la invasión en Ucrania no da tregua y por lo tanto este rubro se seguirá viendo afectado en la medida que se desarrollen los acontecimientos en Europa.

Por último, la carne totalizó un incremento del 11% para la primera quincena de abril. En esta primera mitad del mes, el kilo de la bola de lomo subió un 13,3%; el asado un 10,4%; la paleta 13% y la carne picada 10,6%. En marzo, el promedio de la carne aumentó un 8,5% y 60 puntos de manera interanual.  

Los siete cortes de carnes incluidos en el acuerdo de precios aumentaron entre un 6,6 y 9,5%. En términos anuales, fluctuaron entre 56,3% y 59,9%, por encima de la inflación general.

Las medidas tomadas por el Gobierno de Precios y Cortes Cuidados hasta ahora parecen no tener fruto y los alimentos seguirán por encima de la inflación promedio. Y el Gobierno trabaja en acuerdos con los gobernadores para llevar a las provincias las canasta de cercanía. Los funcionarios apuestan  a que el efecto se sienta en los bolsillos a mediados de mayo.